Dios trata personalmente con cada uno de nosotros. Por eso, cada persona tiene su historia de cómo Dios empezó a formar parte de su vida hasta llegar a ser el centro de ella.
Son historias apasionantes, a veces, pueden parecer irreales pero son tan reales y, a la vez, tan maravillosas como Dios las ha querido hacer. Y lo que Él ha hecho en estas personas, también puede hacerlo en ti y aún cosas más grandes.
Si quieres que tu historia aparezca en este rincón, envía un email con tu testimonio y, al menos, una foto a la dirección:
sentircristiano@hotmail.com
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